Cuidado con el fraude hipotecario

El fraude hipotecario está en aumento.  Es particularmente frecuente en épocas de caos y problemas económicos en el mercado inmobiliario, ya que hay más propietarios de viviendas que afrontan la ejecución hipotecaria y los estafadores se aprovechan de los prestamistas desbordados.  Los prestamistas deshonestos también pueden participar de estos delitos y apuntar a los propietarios de viviendas en crisis.  Existen dos tipos de fraude hipotecario: fraude por vivienda, que está dirigido a los prestamistas, y fraude por ganancia, que está dirigido a los prestatarios. 

Fraude por vivienda 

El fraude por vivienda ocurre cuando los prestatarios tergiversan u omiten información que utilizan los prestamistas para calificarlos para préstamos.  Algunos ejemplos son:

Declaración falsa de ingresos mayores 

Como los prestatarios que trabajan de forma autónoma no suelen registrar sus ingresos totales en las declaraciones de impuestos, muchas veces los prestamistas les permiten informar "ingresos declarados" en su solicitud.  Si sus ingresos declarados son mayores que sus ingresos reales, esto se considera fraude hipotecario. 

Intercambio extraoficial 

Los compradores que aceptan dinero como pago inicial de un vendedor para calificar para un préstamo están cometiendo fraude hipotecario.   

Fraude de propietarios

Los prestamistas cobran tasas hipotecarias más bajas a los prestatarios que compran propiedades ocupadas por sus dueños. Si el prestatario desea comprar la propiedad a modo de inversión, esto se considera fraude hipotecario.

Estafa de rescate de ejecución hipotecaria

Los estafadores de ejecución hipotecaria se aprovechan de los prestatarios que están a punto de perder su vivienda por una ejecución hipotecaria. Convencen a los prestatarios de que van a "rescatarlos" y desaparecen apenas les pagan un honorario. En muchos casos, el prestatario pierde el dinero y su casa.

Fraude por ganancia

El fraude por ganancia ocurre cuando las autoridades hipotecarias, como agentes, expedidores de préstamos o abogados, abusan de su posición de autoridad para beneficiarse del proceso de hipoteca a expensas de un propietario de vivienda o prestatario. Algunos ejemplos son:

Fraude de tasación

En el fraude de tasación, un agente de bienes inmuebles se asocia con un tasador y un ejecutivo de préstamos para aumentar artificialmente el valor de una vivienda con el objetivo de incrementar sus comisiones. Otra alternativa es que un tasador adjudique un valor inferior al real a una propiedad para ayudar a otra persona a comprar la propiedad a un precio más bajo.

Fraude de préstamo predatorio

Un prestamista corrupto puede falsificar los ingresos de los prestatarios para permitirles que califiquen para un préstamo que no pueden pagar.  Esta práctica predominó mucho durante la crisis inmobiliaria de 2008. 

Cómo pueden protegerse los prestatarios 

Las estafas hipotecarias suelen ser muy complicadas y muchas veces son difíciles de detectar.  Aquellos prestatarios que crean que se les está pidiendo infringir la ley deben pedir asesoramiento a un abogado especialista en bienes inmuebles o a la autoridad de licencias de su estado.